Aprender a valorar lo que tenemos. Un balance de 2020

 

Despedimos un año raro. Complejo. Gris. Difícil. Un año que para muchos y muchas ha sido un reto enorme en lo personal, en lo laboral y, por supuesto, en lo emocional. ¿Podemos hacer un balance de lo positivo de este 2020? Podemos, y debemos.

Partamos de una idea: hay un sinfín de realidades. Tantas, que resuelta imposible imaginarlas todas. Sin embargo, a rasgos generales, podríamos decir que nuestra sociedad vive en un estado permanente de insatisfacción. Da igual la edad: niños, niñas, jóvenes, personas adultas… Cuesta no encontrar un destello de insatisfacción.

Algunas de familias que llegan a Crece Bien nos cuentan que se ponen tristes con sus hijos cuando en las navidades, después de recibir muchos regalos, los niños dicen que son pocos regalos. Esto demuestra que lo material es insaciable y que cada vez se necesita más para quedarse tranquilo. Para ser felices. Y, en cierto modo, es normal: queremos hacer felices a los niños, muchas veces darles todo lo que nos piden, y esto lleva a que cada vez tengan más necesidades (algunas propias, pero la mayoría creadas) y que pidan más. Por contra, el esfuerzo realizado para obtener cosas favorece una mayor satisfacción. Por todo ello, podríamos decir que no tenerlo todo y aceptar que no se puede tener, ayudar mucho a valorar lo que se tiene. 

¿Podemos aprender a valorar más lo que tenemos y, así, enseñar también a nuestros hijos a valorarlo? Podemos. Ayuda mucho enseñarles a compartir con los demás, hacerles conscientes de que hay otros niños que no tienen de todo, ayudarles a valorar lo que nos rodea, ser agradecidos… Todo esto nos acerca a sentirnos felices y satisfechos mas que cualquier cosa material.

Un cambio hacia el pensamiento constructivo

Ahora bien, no sólo tiene que ver con lo material. Cuesta gestionar las malas noticias, y más aún los cambios enormes como los que nos ha traído este 2020. A la pregunta de si podemos sacar algo positivo de 2020 aunque nos haya ido mal hay una respuesta clara: sí, podemos sacar muchas cosas positivas.

Y es que, siempre hay aspectos para aprender, para descubrir qué es lo positivo que podemos hacer con lo que nos pasa que no nos gusta. Este año hemos visto en muchas ocasiones el valor real de la familia y de la salud, hemos tenido tiempo de estar juntos y de ir más lento, de pararnos a pensar. Ha habido muchísimas cosas difíciles y aún las sigue habiendo, pero los momentos duros son parte de la vida, no podemos cambiar su existencia, lo que sí está en nuestras manos es aceptar que ocurren y moldearnos a nosotros mismos a través del aprendizaje que sacamos de ellos y de la actitud que ponemos en práctica.

No podemos cambiar los momentos duros pero sí está en nuestras manos es aceptar que ocurren y moldearnos a nosotros mismos a través del aprendizaje que sacamos de ellos y de la actitud que ponemos en práctica.

¿Cómo transmitir un optimismo útil a los niños y niñas? Algunas ideas que pueden ayudarnos:

  • Cambiemos el optimismo por el pensamiento constructivo, el que nos ayuda a pensar en lo que podemos, a valorar de lo que nos rodea, a conocer lo que somos y lo que podemos hacer y qué soluciones podemos adoptar ante los problemas. Más que un pensamiento optimista es una actitud constructiva para enfrentarlos a la vida.
  • Pensar de forma constructiva se entrena hasta que se convierte en un hábito.
  • Hay veces que los niños (y los adultos) lo ven todo negro, y en esos momentos es maravilloso ayudarles con preguntas como “¿Qué se te ocurre que podemos hacer?” “Y si no tiene solución, ¿qué podemos hacer para sentirnos mejor?”  “¿Qué podemos aprender de esto?” Son pequeñas semillas que podemos sembrar y que con el tiempo harán crecer una actitud constructiva ante lo que nos ocurra.

 

En Crece Bien somos profesionales con amplia experiencia en inteligencia emocional. Si tienes alguna duda o necesitas alguna recomendación, te animamos a que contactes con nosotros, estaremos encantados de atenderte. Puedes hacerlo en el correo electrónico informacion@crecebien.es o en el teléfono 910002602.